La escasez global de microchips, que comenzó a afectar gravemente a la industria automotriz en 2020 y se extendió hasta bien entrado 2024, tuvo consecuencias significativas en la producción de coches nuevos. En 2025, aunque la situación de suministro de semiconductores ha mejorado ligeramente, su impacto residual sigue resonando en el mercado de coches de segunda mano en España. La pregunta clave es si esta crisis ha mantenido los precios de los vehículos usados artificialmente altos y cómo afecta a quienes buscan o desean vender su automóvil (“compramos tu coche“).
Análisis de cómo la escasez de microchips que afectó a la producción de coches nuevos sigue impactando en los precios del mercado de segunda mano
La crisis de los microchips generó un efecto dominó en el sector automovilístico:
- Reducción de la Producción de Coches Nuevos: La falta de componentes electrónicos esenciales obligó a los fabricantes a reducir o incluso detener temporalmente la producción de ciertos modelos. Esto significó una menor disponibilidad de coches nuevos en los concesionarios.
- Aumento de la Demanda de Coches Usados: Ante la dificultad para adquirir un coche nuevo rápidamente y, en algunos casos, con plazos de entrega muy largos, muchos consumidores se volcaron al mercado de segunda mano como una alternativa inmediata. Este aumento de la demanda ejerció presión al alza sobre los precios de los vehículos usados.
- Menor Renovación de Flotas: Las empresas de renting y alquiler, que suelen renovar sus flotas periódicamente, también se vieron afectadas por la escasez de coches nuevos. Esto limitó la cantidad de vehículos relativamente jóvenes que llegaban al mercado de segunda mano, manteniendo la oferta ajustada.
- Retraso en la Llegada de Modelos Seminuevos: La menor producción de coches nuevos significó que también tardaron más en llegar al mercado de segunda mano vehículos seminuevos con pocos kilómetros, que suelen ser muy demandados.
¿Se Han Estabilizado los Precios o Siguen Siendo Elevados?
En 2025, se observa una cierta estabilización en los precios de los coches de segunda mano en comparación con los picos alcanzados durante los peores momentos de la crisis de los microchips. Sin embargo, los precios generalmente se mantienen por encima de los niveles pre-pandemia en muchos segmentos. Varios factores influyen en esta situación:
- Mejora Gradual del Suministro de Microchips: La producción de semiconductores se ha recuperado parcialmente, lo que ha permitido a los fabricantes aumentar ligeramente la producción de coches nuevos. Esto ha aliviado algo la presión sobre la demanda de usados.
- Inflación Generalizada: La inflación en la economía española también ha afectado al precio de los bienes, incluidos los automóviles, tanto nuevos como usados.
- Demanda Sostenida: A pesar de la mejora en la producción de nuevos, la demanda de coches de segunda mano sigue siendo sólida, impulsada por factores económicos y la búsqueda de opciones más asequibles.
- Antigüedad del Parque Automovilístico: El parque automovilístico español tiene una edad media relativamente alta, lo que mantiene una demanda constante de vehículos de ocasión para reemplazar coches más antiguos.
Para aquellos que buscan vender su coche (“compramos tu coche“), la situación actual sigue siendo favorable en muchos casos. Los precios pueden no ser tan altos como durante el punto álgido de la crisis, pero la demanda sostenida y la relativa escasez de algunos modelos hacen que los vendedores puedan obtener precios competitivos.
En conclusión, la crisis de los microchips dejó una huella duradera en el mercado de coches de segunda mano en España. Si bien los precios se han estabilizado en 2025, todavía se encuentran influenciados por la menor producción de coches nuevos en los años anteriores y por la inflación general. Para los compradores, esto significa que todavía pueden encontrar precios algo elevados en comparación con la situación pre-crisis. Para los vendedores, la demanda se mantiene, ofreciendo oportunidades para obtener un buen precio por su vehículo. La evolución futura del mercado dependerá de la recuperación completa de la industria de los semiconductores y de la dinámica general de la economía española.
